Ya toca desnudarse del violeta,
ya mudo de estado civil.
La viudedad en plena luna de miel
no es frecuente y tampoco accidental.
Nunca me dijiste que ibas a morirte
y pasé un mes esperando a que me señalaras
dónde podía llevarte las flores.
Y ahora te apareces como un grosero resucitado
que disfruta del Valhalla.
Ya que no fui una viuda negra,
permíteme cuanto menos ser una viuda alegre.
Y hazme el favor de morirte otra vez.
http://unabohemia.blogspot.es/1163784000/#com
viernes, 1 de diciembre de 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario