viernes, 4 de enero de 2008

Me matas


Soy gilipollas.


En las noches de insomnio me dejo llevar por esta ansiedad que me hace dormir abrazada al teléfono móvil. Futuro cáncer de corazón. Sobre el pecho, en silencio, esperando que un destello luminoso me haga abrir los ojos secos. Desde hace tiempo al final me quedo dormida y sueño que soy gilipollas. Al despertarme sé que es cierto. No ha contestado ni lo hará.


Antes teníamos motivos sociales para hablarnos. Estas navidades han desaparecido. Nada de formalismos. Quizá sí que deseas que pase felices fiestas o que tenga un buen año 2008, es muy probable que haya nacido en ti ese deseo, pero a mí no me ha alcanzado. Había decidido darte por muerto una vez más, pero como soy gilipollas y anoche no me dejabas dormir, escribí un impersonal: "FELIZ AÑO NUEVO". Son palabras basura.


Esto es el fin del fin.


4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hey, tía, ánimo. Que le den.

Anónimo dijo...

Gracias.
Lo peor es que... 24 horas después, apareció...

Anónimo dijo...

No me jodas, ¿en persona?, ¿en versión sms?...

La otra dijo...

Vía móvil